Masia Bepo i Lola

Masia para hacer despedidas de solteros ideal, aunque las habitaciones y los baños dejan un poco que desear. Se puede poner música fuerte ya que estás a las afueras del pueblo. Muchas zonas comunes y te lo puedes pasar pipa en la piscina si hace buen tiempo. La cocina no le funcionan la mitad de los fuegos y la cafetera no la sabíamos poner pues no tiene manual de instrucciones.

Necesita mantenimiento. Zonas comunes no valen para invierno ya que están en el exterior. Estropeado fuegos de cocina, lavavajillas, ducha... Falta menaje cuchillos, trapos.. . La zona es de muchas empresas agricolas y campos y el olor es desagradable. Por lo demás bien. Coche para ir a ver otros pueblos alrededor. Lo mejor , la compañía.

Un grupo de treinta amigos hemos pasado el puente de diciembre en la masía, ocupando ambas casas. Es un complejo con mucho potencial si se le dedica tiempo y mantenimiento. El jardín es precioso y es donde hemos pasado los mejores momentos, cuando el tiempo lo ha permitido. El lavavajillas de Bepo perdía agua. Su uso para tantas personas era muy habitual, por lo que la cocina se encharcaba. Conviene que revisen el menaje. Cacerolas, número de cafeteras, etc. Los cuartos de baño agradecerían una reforma. En la planta baja de casa Lola olía a desagüe. Puede ser debido al no uso de la cocina, ya que fijamos la zona común del grupo en Bepo. La masía está rodeada de granjas. El olor consecuente es latente. Pero, te acostumbras. Al fin y al cabo es una zona rural. Lugar tranquilo en el que se puede dormir tranquilamente ya que no se escucha ni un ruido por la noche.

Habitaciones bastante anticuadas y mal funcionamiento de la grifería de baños. A las cocinas tampoco les funcionan los fuegos. Le doy dos estrellas porque el jardín es amplio, y para verano y realizar vida en el exterior está correcto.

Brutal. Amplia y con todo lo necesario para pasar un gran finde con mucha gente. Puedes perderte en cualquier momento para disfrutar de las instalaciones.